La masiva red podría recorrer más de 40.000 kilómetros y representar una inversión superior a 10.000 millones de dólares.
La ruta inicialmente propuesta iría desde la costa atlántica de EE.UU. hasta la India, pasando por Sudáfrica, y luego desde la India hasta la costa oeste de EE.UU. a través de Australia, creando una forma de «W» a nivel global.