El arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, pidió el domingo al gobierno del presidente Nayib Bukele que no convierta el país en una “gran” cárcel internacional, en alusión a los vuelos que ha recibido la nación centroamericana desde mediados de marzo con migrantes venezolanos y salvadoreños deportados por Estados Unidos, tras ser señalados como presuntos miembros de pandillas.
Todos han sido enviados al Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot), la cárcel construida por el gobierno y cuestionada por organizaciones de derechos humanos por las continuas violaciones a la legislación internacional.
“A ningún país le conviene ser cárcel de otros países o de otro país, pedimos al gobierno que no se permita eso”, subrayó el arzobispo.«Posiblemente queriendo un mejor trato para los migrantes nuestros que están allá (en Estados Unidos), posiblemente, no sé las causas, pero el hecho es que no conviene”, dijo. Créditos: Últimas Noticias.